El actual concejal Pablo García Ramírez entregó a la comunidad de Quinta Normal y al concejo municipal realizado el martes 13 de septiembre recién pasado, el libro con la transcripción de una investigación realizada por el Departamento de Cultura de la Corporación Comunal de Desarrollo de Quinta Normal, el año 1982, dirigida por Fernando Plaza con apoyo del sociólogo y periodista Alejandro Guillier , la antropóloga Josefina Hurtado, Raquel Pardo y Agustín Guajardo dos jóvenes historiadores que asistieron al equipo. Además incluye algunas crónicas elaboradas por García, que se incorporan como anexo.
En la presentación del libro Pablo García señala: “A raíz de que el 06 de octubre 2015 nuestra querida comuna cumplió 100 años, me comprometí a indagar y buscar toda la información disponible para escribir las vivencias de los quintanormalinos y todos los hechos que han marcado su desarrollo. De hecho comencé a escribir crónicas que en cada sesión del concejo municipal leía para dejar rastros de nuestra historia, algunas de estas las publiqué en el Diario Comunal cuando fue posible; sin embargo no me sentía satisfecho”
García afirmó para “El Carrascal” que: La recuperación de la historia y patrimonio cultural de nuestra comuna es primordial en este centenario, es un legado para las próximas generaciones de quintanormalinos.
El libro cuenta en una de sus partes, “En el año 1982 tuvimos un invierno con lluvias torrenciales, una de ellas desbordó el río Mapocho y fue un hecho noticioso que ocupó a toda la prensa y televisión de la época. Quinta Normal fue conmocionada por este evento, entre el puente La Máquina y el puente General Velásquez se desmoronaban los taludes ribereños del costado sur del río y la máxima preocupación era que no se inundara el Hospital Félix Bulnes Cerda, ya que se señalaba que en los subterráneos estaban los grupos electrógenos; además la posibilidad cierta que el río se llevara el puente General Velásquez. Estuvimos muchos funcionarios apoyando a los equipos municipales de emergencia, de dos días y dos noches completas. La primera medida fue ocupar alrededor de 5.000 soleras que estaban en Departamento de Aseo y se tiraron a las patas del citado puente para protegerlas, medida que obviamente no fue suficiente ni significativa. La Dirección de Vialidad envió maquinaria pesada para desbancar el río y alinearlo. Gran gestor en la conducción de los trabajos fue nuestro recordado funcionario Carlos Martínez, “el chico Martínez”, con vasta experiencia ya que había trabajado en Obras Públicas. Los camiones tolva traían una roca cada vez de una cantera de la comuna de Quilicura y con estas rocas, metódicamente se fueron afianzando las columnas que sostenían al puente. Resulta anecdótico ahora recordar el impase que tuvimos con el Alcalde de Renca, ya que el alineamiento del río significó desviar su virulencia de las corrientes de agua hacía esa comuna en donde se desbordó, inundando las poblaciones aledañas y socavando gravemente las torres de alta tensión de ese costado”.
También podemos encontrar antecedentes sobre los hechos ocurridos durante el terremoto del 85 en nuestra comuna.
Conoce más sobre la historia de Quinta Normal. Interesados solicitar ejemplar digitalizado a: pablogarciaramirez@gmail.com
