Hoy, en un aniversario más del nacimiento de Violeta del Carmen Parra Sandoval, recordamos a una de las artistas más emblemáticas de Chile y de América del Sur. Su legado como folclorista, compositora y cantante sigue vivo, no solo en la música y la cultura chilena, sino también en los recuerdos de su paso por nuestra querida comuna de Quinta Normal, donde vivió junto a su familia durante su juventud.
Violeta Parra y su vínculo con Quinta Normal
En 1932, tras la muerte de su padre en Chillán, la familia Parra migró a Santiago, buscando nuevas oportunidades. Fue en Quinta Normal donde Violeta vivió los primeros años de su estadía en la capital, en una casa ubicada en Edison esquina Barbosa, alrededor de 1935. Su hermano Nicanor Parra, ya instalado en Santiago, fue un pilar fundamental en la llegada de Violeta a la ciudad. Junto a su madre y hermanos, Violeta comenzó a explorar la vida en Santiago, alejándose de los estudios formales y acercándose cada vez más a la música.
Violeta y su familia se establecieron en Quinta Normal durante un periodo significativo, donde compartieron la vida cotidiana con otros vecinos que serían testigos de sus primeras incursiones en el arte. Su hija, Isabel Parra, recuerda con cariño las amistades que formaron durante esos años en la calle Edison.
La bohemia y el arte en Matucana
Durante la década de 1940, Violeta Parra, junto a sus hermanos Hilda, Eduardo y Roberto, comenzaron a dedicarse por completo a la música, dejando atrás otros trabajos formales. El Popular, un bar-restaurant en la Avenida Matucana 1080, se convirtió en un punto clave en su carrera. En este emblemático local, conocido por su caldo de pata y su ambiente bohemio, los hermanos Parra comenzaron a ganar sus primeros sueldos cantando boleros, cuecas y valses, en un ambiente de ebullición cultural que caracterizaba al barrio de Matucana.
Fue en este barrio donde Violeta comenzó a construir su legado musical, que más tarde la llevaría a ser una de las principales divulgadoras del folclor chileno. Su cercanía con los movimientos sociales y culturales de la época, especialmente ligados a la vida ferroviaria y popular de Quinta Normal, influyó en su sensibilidad artística y en la creación de muchas de sus obras.
Quinta Normal en la vida de Violeta
A pesar de que Violeta Parra eventualmente dejó Santiago para continuar su búsqueda artística en otras partes de Chile y del mundo, su paso por Quinta Normal dejó una huella importante. Aquí, experimentó las contradicciones de la vida urbana, lo que la ayudó a desarrollar una conciencia social crítica, que se vería reflejada en sus canciones y en su filosofía de vida.
El Cité de las Viudas, ubicado en la calle Andes, fue otro lugar clave en la vida de Violeta y su familia, donde vivió junto a su madre Clarisa y su hija Isabel. Este cité, construido originalmente para mujeres que habían perdido a sus esposos en accidentes laborales, albergó a la familia Parra en uno de los momentos más formativos de su vida.
Un legado eterno
Hoy, al celebrar un año más del nacimiento de Violeta Parra, su nombre sigue resonando en los rincones de Quinta Normal. La estación de la futura Línea 7 del Metro, que se construye sobre el antiguo bar El Popular, podría llevar su nombre, un recordatorio de que aquí comenzó a construir su historia, rodeada del calor popular de Matucana.
Violeta Parra no solo es un ícono del folclor chileno, sino también un símbolo de resistencia, creatividad y pasión por la vida. Su paso por nuestra comuna es un capítulo importante en su vida, y nosotros, como quintanormalinos, celebramos su legado con orgullo.
¡Feliz aniversario, Violeta! Tu historia sigue viva en Quinta Normal.
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