En la imagen, un policía turco levanta el cuerpo sin vida de un niño sirio que se ahogó frente a las costas de Turquía.
La imagen del cadáver de un niño sirio que fue arrastrado hasta las costas turcas, reflejó ayer la crudeza del drama migratorio en las puertas de Europa. El menor sería uno de los 12 niños sirios que se ahogaron en su intento por llegar a la isla de Kos en Grecia y que confirmó los riesgos que conllevan los viajes hacia Europa.
Tras su divulgación, la imagen del niño sirio se volvió viral, al igual que el hashtag #KiyiyaVuranInsanlik (humanidad arrastrada hacia la playa).
Según datos de la Unicef, citados por el diario El País, dos millones de menores sirios viven como refugiados en otros países. Aunque la mayoría de ellos se encuentra en países vecinos, cada vez son más las familias que deciden llevarlos consigo hacia Europa. Un tercio de los migrantes que desembarcan en Grecia, principal punto de entrada de los sirios, son mujeres y niños.
“Esta imagen trágica de un niño que perdió su vida huyendo de Siria es chocante y es un recordatorio de los peligros que toman las familias y niños en busca de una vida mejor. Esto debería forzar a la Unión Europea a acordar un plan para hacer frente a la crisis de refugiados”, dijo al diario británico The Guardian, Justin Forsyth, de la organización Save the Children.b
Fuente: La Tercera
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